Los dueños de gatos siempre han presumido de la independencia de sus mascotas. A estos animales no es necesario bañarlos, si se quedan sin comida, se las ingenian para obtenerla. Eso es un punto a favor para los astutos mininos, que hace pensar que su inteligencia los hace no necesitar, ni siquiera de nuestra compañía.
Los perros, por su parte, son todo lo contrario. Si son domésticos y los dejamos sin comida, mueren de hambre. Así de sencillo.
Los perros o los gatos ¿Cuál de los dos es más inteligente?
Sí, es obvio pensar que la inteligencia de los gatos les permite ser así. Una investigación ha confirmado lo contrario. Lo siento por nuestros amigos amantes de los gatos, el debate sobre cuál de los dos es más inteligente, ha sido resuelto... O así parece.
La investigación del científico Juliane Kaminski y sus colegas de la Universidad de Portsmouth, en el Reino Unido, publicada en febrero pasado por el periódico The Wall Street Journal, evidencia que los perros son más inteligentes que los gatos. Los caninos son capaces de reaccionar a señales asociadas con determinados objetos y situaciones. Los gatos no lo pueden hacer.
El experimento se realizó con un perrito llamado Rico. A él se le hicieron diferentes pruebas. Cuando se le ordenaba traer un objeto que él conocía por su nombre, lo hacía sin ninguna dificultad. Además, cuando se le ordenó traer un juguete nuevo con un nombre nuevo, logró tomar el objeto de entre los que ya conocía, relacionando el nuevo juguete con la nueva palabra. Esto lo realizó sin ningún tipo de entrenamiento.
El estudio indicó que muy pocos animales pueden razonar de esa forma. El experimento se realizó con otros perros y se obtuvieron resultados similares.
La habilidad de los gatos, según el análisis, no es responder a pruebas de intelecto humano, sino que muestran una gran habilidad para cazar y conseguir su comida que los perros no tienen.
Los canes son capaces de distinguir nuestro estado de ánimo, con solo nuestro tono de voz. Mi perro Freddy, por ejemplo, con una sola mirada puede saber que no quiero que se suba al sillón. Se hace el muerto para que no lo baje de la cama y, otra perra que hay en mi casa, ya aprendió a abrir la puerta golpeándo el llavín con sus patas. Ahora nada más hay que enseñarle a que no se la abra a extraños.
También resulta curioso que los perros pueden entender cuando señalamos hacia algún lugar con nuestro dedo. El estudio dice que esta habilidad no la tienen ni siquiera los gorilas.
La pregunta que me hago ahora es si los gatos no responden a las órdenes humanas porque no las entienden, o porque no quieren hacer caso. He escuchado por ahí que los gatos creen que son los dueños de los humanos y no al revés como siempre se ha pensado. ¿Ustedes qué opinan?
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